Elon Musk retuitea a Milei pero pone sus fábricas en Asia

El 19 de noviembre, día en que Javier Milei se convirtió en el ganador de las elecciones presidenciales, Elon Musk, dueño de Tesla –una de las empresas más importantes del planeta–, celebró en X (extwitter) el triunfo del dirigente de la Libertad Avanza en un gesto inesperado que puso al argentino en la vidriera del mundo paleolibertario.




Casi cinco meses después, ambos defensores de la libertad entendida a su modo se reunieron en Texas, donde Musk tiene una de sus fábricas de vehículos eléctricos. 


Allí se saludaron, conversaron, se sacaron fotos, y prometieron celebrar un evento juntos en Argentina.


Sin embargo, y amén de la autocelebración en redes de los militantes y trolls paleolibertarios, los negocios de Musk –que son parte de la agenda de los gobiernos de las principales potencias mundiales– suceden muy lejos de nuestro país. 


Por un lado, en China, donde Tesla tiene uno de los negocios más prósperos del mundo. 


El otro podría ser India, donde el Financial Times informó días atrás que ejecutivos de la empresa de Musk viajaron al gigante asiático para buscar un lugar donde abrir una nueva fábrica.


Mientras China –a pesar de todo el comunismo que profesa, según el diagnóstico de Milei– es uno de sus principales mercados para el mundo automotor en general y en particular, para los vehículos eléctricos, la India es una plaza con cientos de millones de potenciales compradores. 


Pero, además, es un país cuyo gobierno ha desplegado desde hace años una estrategia para lograr que el empresario norteamericano instale una de sus fábricas en el país.


Video relacionado: Milei a Elon Musk en la fábrica de Tesla en Texas: "Gracias por lo que haces por el mundo" (Dailymotion)

Parte de ese cortejo es la reciente aprobación de una norma para reducir las tarifas de importación de vehículos eléctricos. 


Una pretensión de Musk a la que el primer ministro Narendra Modi accedió, aunque con la condición de que las empresas cuyos autos paguen menos impuestos se fabriquen en India en un plazo menor de tres años. 


Ahora, se está estudiando la posibilidad de que Tesla construya un vehículo eléctrico más económico que los modelos actuales para ser vendido en territorio indio, pero también exportado a países de la región. 


Prueba de que cortejar a una de las compañías más valiosas del mundo incluye además una clara defensa del interés nacional.


El posible desembarco de Tesla en India ya es una realidad en México, donde gobierna el morenista López Obrador, y a quien posiblemente suceda en el cargo la actual jefa de Gobierno de México DF, Claudia Sheinbaum. 


La empresa de Musk estará lista para vender sus vehículos desde ese país a partir del 2026. Otra prueba de que los negocios dependen de otras cosas, y no de mostrar sintonía ideológica o lanzarse elogios en las redes sociales.



Fuente: https://www.msn.com/es-ar

Comentarios